Cuando las vueltas bajo el coche de seguridad frustran a pilotos y aficionados
Durante los grandes premios, especialmente en situaciones de safety car, es común que tanto los pilotos como los seguidores experimenten cierta irritación cuando las vueltas en esas condiciones parecen prolongarse excesivamente. En el Gran Premio de España, Lewis Hamilton mostró claramente su frustración a través de la radio, calificando el fenómeno con la expresión: «Les encanta arruinar vueltas». El siete veces campeón del mundo capturaba así el sentimiento creciente de impaciencia en el paddock y entre parte de la afición, ante los largos períodos en los que la carrera se detiene detrás del coche de seguridad. La causa principal de estas demoras es una regla que permite a los pilotos que van retrasados adelantar el safety car para reincorporarse al grupo de cabeza. Aunque conocida desde hace tiempo, esta normativa ha causado en ocasiones una pérdida significativa de tiempo en la competencia reciente.
Un ejemplo palpable se dio en Barcelona, donde el coche de Andrea Kimi Antonelli, detenido en pista, fue retirado en solo seis minutos. Sin embargo, el pelotón permaneció neutralizado durante aproximadamente diez minutos completos. De ese tiempo, cerca del 40 % fue dedicado a realizar la maniobra conocida como unlapping, es decir, que permite a los coches retrasados adelantar el coche de seguridad y volver al liderato. Este hecho reabre el debate: ¿es realmente necesaria en la Fórmula 1 actual esta regla de tiempos desfasados?
¿Una norma de otro tiempo?
Para los detractores de este procedimiento, la respuesta es bastante clara: «El coche de seguridad debe permanecer en la pista el menor tiempo posible», opina un ingeniero de equipo citado por RaceFans. «Una vez que la pista está asegurada, prolongar la presencia de los vehículos retrasados solo genera una espera innecesaria». Además, la Fórmula 1 ha implementado reglas muy estrictas respecto a la utilización de banderas azules. En contraste con otros campeonatos, como la IndyCar, donde los pilotos retrasados son rápidamente ordenados a ceder posición, en la F1 el proceso es más expedito, pero aún así puede resultar en pérdidas de tiempo considerables.
«Entonces, ¿por qué desaprovechar varias vueltas de carrera cuando podrían simplemente apartarse en la relanzada y seguir adelante?»
Defendiendo la integridad deportiva
No todos están de acuerdo con la eliminación de esta normativa. Algunos argumentan que mantenerla es fundamental para garantizar la justicia y la competencia equitativa. «Si dejamos que los retardatarios permanezcan en medio del pelotón, alteramos el reinicio de la carrera», explica un experto técnico. «Pilotos que luchan por puntos podrían verse separados por un coche que no está en vuelta, lo cual genera confusión y complicaciones innecesarias». Es importante también recordar que el tiempo total pasado bajo el safety car no depende únicamente de esta regla específica. En Imola, por ejemplo, después de la salida de Antonelli, la remoción del vehículo tardó más de once minutos, debido a las dificultades para retirar el coche en esa zona del circuito, mientras que en el proceso de unlapping solo se emplearon aproximadamente tres minutos.
¿Se puede encontrar un punto intermedio?
La FIA podría considerar implementar una solución que balancee los intereses. Una posibilidad sería activar la relanzada de manera inmediata, para luego, mediante la utilización de banderas azules, facilitar la incorporación progresiva de los coches retrasados en el pelotón. Esta idea, que ya se planteó tras la controversial carrera de Abu Dhabi en 2021, aún no ha sido aplicada oficialmente y sigue siendo objeto de debate en el mundo de la Fórmula 1.
Mientras tanto, la controversia continúa. ¿Debe la categoría preservar la pureza competitiva incluso si eso implica pérdidas de vueltas? ¿O es preferible aceptar un orden de carrera alterado para ofrecer un espectáculo más emocionante y visualmente impactante desde el primer momento? La temporada 2025 podría ser el escenario donde la FIA tenga que tomar una decisión definitiva en este aspecto.