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VPG: réplicas de volantes que salen de la misma fábrica que los originales.

Stand pequeño, gran promesa. Una marca presenta en Dortmund dos volantes de fibra de carbono que no son simples copias: salen directamente de la fábrica que produce los volantes para Porsche y Ford Mustang. Un enfoque que cambia las reglas en el mundo de las réplicas para simulación de carreras.

Del aluminio a la fibra de carbono

La firma evoluciona. Conocida históricamente por sus volantes de aluminio, da un giro hacia la fibra de carbono contando con una estrategia singular: trabajar directamente con los constructores de los volantes de competición auténticos. El resultado es claro: las réplicas nacen exactamente en la misma planta que las piezas originales.

La planta mencionada se ubica en el Reino Unido y pertenecía a Rolls-Royce. Dispone de toda la infraestructura necesaria para gestionar procesos cerámicos y cumplir con estándares de calidad aeronáutica. Cada volante requiere más de 10 horas de mecanizado, y esa precisión garantiza que todas las unidades sean absolutamente idénticas.

Dos modelos en el catálogo

En este momento, la firma propone dos volantes: uno inspirado en un Mustang GT3 y otro basado en un modelo de Porsche. Ambos adoptan la misma filosofía: fibra de carbono en su totalidad, acabado impecable y botones idénticos a los de los volantes utilizados en los automóviles de referencia. En la mano, se percibe de inmediato la ligereza y la precisión del mecanizado.

Precios anunciados: entre 1 300 y 1 600 € sin impuestos, lo que equivale a aproximadamente 2 000 € con impuestos. Un costo elevado, pero acorde con el proceso de fabricación y la garantía de disponer de un volante proveniente de la misma cadena de producción que los originales.

No exactamente idénticos, y eso es mejor

Los volantes de esta firma no son copias exactas en carbono. Dos diferencias notables frente a los originales: luces LED suplementarias (para contentar a los jugadores, aunque el Porsche oficial no las lleva) y dos interruptores extra tipo Funky para gestionar las simulaciones. Estos añadidos tienen sentido y hacen que el volante gane en funcionalidad para el sim racing.

El montaje es sencillo: adaptador QR compatible (probado con Simucube en el stand, instalación en 2-3 minutos), y un cable USB directo al ordenador. Sin cajas intermedias ni trámites complicados.

Un momento notable

La firma presentó el nuevo Porsche GT3 en su stand, el modelo lanzado a mediados de 2025. Y ahí es donde todo se pone interesante: gracias a la colaboración directa con el fabricante, pudieron sacar la réplica del volante prácticamente al mismo tiempo que el coche. Algo nunca visto en el mundo del sim racing, donde suele existir un desfase significativo entre la llegada del coche y la réplica del volante.

La opinión de la publicación

Para los puristas que buscan el realismo extremo, o para pilotos profesionales que desean entrenar con el mismo volante que el coche real, la propuesta ofrece una solución singular. La calidad de mecanizado es notable, la ligereza también, y disponer de la réplica en el mismo momento de la salida del vehículo representa una gran ventaja.

Eso sí, el catálogo sigue siendo limitado a apenas dos modelos. Se espera que la gama se vaya ampliando si la propuesta encuentra su público. Porque, más allá del precio, se trata de una cuestión de filosofía: ¿queremos un gran volante de sim racing o exactamente el mismo que usa la versión real? La firma parece apostar claramente por la segunda opción. Descubre nuestro video a continuación 👇

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