El Gran Premio de Bélgica en el circuito de Spa-Francorchamps ocupa un lugar especial en la historia de la Fórmula 1. Este trazado desafiante, conocido por su diseño técnico y las condiciones meteorológicas variables, ha sido testigo de carreras memorables que aún permanecen en la memoria de los aficionados. Su carácter impredecible y las historias que se han forjado allí hacen de esta carrera un evento único en el calendario del automovilismo.
Con el retorno de la prueba belga en esta semana, es momento de recordar ocho momentos que marcaron profundamente la historia de este gran evento en la élite del automovilismo.
1. 1991: El debut espectacular de Michael Schumacher
El 25 de agosto de 1991, una joven promesa alemana hizo su primera aparición en la Fórmula 1 en circunstancias muy especiales. Michael Schumacher tomó el volante de un coche de Jordan, reemplazando a última hora a Bertrand Gachot, quien se encontraba en prisión. Además, era la primera vez que el futuro campeón pisaba Spa-Francorchamps.
Para familiarizarse con el circuito, Schumacher se recorrió el trazado en bicicleta, un gesto que reflejaba su espíritu de aprendizaje y determinación. Sorprendentemente, logró clasificar en séptima posición en su debut, dejando atrás a su compañero de equipo, Andrea de Cesaris, quien contaba con mayor experiencia en esa pista. Sin embargo, en la carrera, su participación fue breve: un problema en el embrague le obligó a abandonar en la primera vuelta, pero el impacto ya estaba hecho.
Su rendimiento llamó la atención de Flavio Briatore, entonces director de Benetton, quien decidió contratarlo para la siguiente carrera, marcando el inicio de una carrera que transformaría para siempre la historia de la Fórmula 1. La capacidad de Schumacher para adaptarse rápidamente a un circuito desconocido y destacar en su primer intento fue solo el principio de su meteórica trayectoria.
2. 1998: El caos bajo la lluvia y el enfrentamiento en el paddock
La edición de 1998 quedará en la memoria como una de las carreras más caóticas en la historia del Gran Premio de Bélgica. La carrera comenzó bajo una intensa lluvia, un escenario que complicó las maniobras de los pilotos y aumentó la incertidumbre.
Desde el inicio, David Coulthard provocó un enorme accidente en la curva del Raidillon, involucrando a 13 autos en un choque en cadena que llevó a una bandera roja de inmediato. Tras el reinicio, la tensión no se disipó. Michael Schumacher, que lideraba la carrera, intentó adelantar a Coulthard, pero en la lucha, Coulthard elevó el pie en medio de la tormenta de obstáculos. Schumacher, sin poder ver bien a través de los escombros y el spray de agua, impactó frontalmente con Coulthard, perdiendo la rueda delantera derecha.
El piloto alemán, furioso, fue directo a enfrentarse con Coulthard en el garaje de McLaren, en una confrontación que resaltaba la intensidad de aquel momento. Mientras tanto, Damon Hill aprovechó el caos para lograr su primera victoria en la Fórmula 1, superando a Ralf Schumacher en una Williams en un fin de semana marcado por la tensión y la imprevisibilidad. La carrera evidenció la brutalidad y la imprevisibilidad del trazado belga, donde cualquier error puede terminar en desastre, pero también en gloria.
3. 2000: La maniobra legendaria de Häkkinen
El Gran Premio de 2000 nos dejó una de las maniobras más conocidas y admiradas de la historia moderna de la Fórmula 1. Mika Häkkinen y Michael Schumacher protagonizaron un duelo épico por la victoria en la carrera en Spa.
En la recta del Kemmel, ambos conductores alcanzaron a Ricardo Zonta, que rodaba con una vuelta de retraso. La estrategia de Schumacher fue bloquear a Häkkinen con su Ferrari, desplazándose a la izquierda para cerrar la trayectoria del finlandés. Sin embargo, Häkkinen no se rindió y, en una maniobra audaz, tomó la curva por la derecha, usando la BAR 002 de Zonta como pantalla para adelantar a ambos.
Moviendo con precisión casi quirúrgica, Häkkinen superó a Zonta por la derecha y a Schumacher por la izquierda en una acción que se ha convertido en un clásico de la heroica conducción en la Fórmula 1, permitiéndole tomar la delantera y asegurar la victoria en esa carrera memorable.
4. 2004: El séptimo título de Schumacher en Spa
Spa-Francorchamps fue testigo del último campeonato mundial conseguido por Michael Schumacher, en un escenario donde siempre se sintió cómodo. En 2004, el piloto alemán consiguió su séptimo título mundial en la historia de la Fórmula 1, en una temporada dominada por Ferrari.
Aunque Kimi Räikkönen ganó la prueba con su McLaren, el segundo puesto de Schumacher fue suficiente para asegurar el campeonato, con aún varias carreras por disputar. Este logro consolidó aún más la leyenda de Schumacher y de Ferrari, en una de sus campañas más intensas y exitosas. Además, la victoria se produjo en el mismo circuito donde comenzó su carrera, hace trece años, cerrando un ciclo de éxitos y elevando su legado a niveles históricos.
5. 2008: La victoria que luego fue retirada de Hamilton
El Gran Premio de 2008 fue un combate repleto de tensión y decisiones polémicas, especialmente en los últimos compases. Lewis Hamilton, en un duelo con Kimi Räikkönen en condiciones de lluvia intermitente, buscaba la victoria.
En los últimos metros, Hamilton intentó adelantar a Räikkönen en la curva del chicane Bus Stop, en una maniobra muy discutida. La disputa lo llevó a cortar la chicane, lo que fue penalizado por los comisarios con una penalización de 25 segundos por mantener una ventaja indebida. Aunque cruzó la meta en primer lugar, la penalización le privó de la victoria, que fue heredada por Felipe Massa, piloto de Ferrari.
Este episodio generó un amplio debate en la comunidad deportiva y tuvo un impacto importante en la batalla por el campeonato ese año. La polémica reflejaba cómo las decisiones en pista pueden alterar dramáticamente el destino de un campeonato, y quedó grabada como uno de los momentos más controvertidos en la historia de Spa.
6. 2009: La sorprendente actuación de Fisichella y Force India
La clasificación de 2009 sorprendió a todos al ver a Giancarlo Fisichella al frente en su Force India, un coche considerado modesto en comparación con los principales contendientes. Con una vuelta perfecta, logró la pole position en la carrera en Spa.
Durante la carrera, Fisichella confirmó su rendimiento excepcional, logrando un segundo puesto que le permitió a Force India sumar sus primeros puntos en la historia de la Fórmula 1, además de su primer podio. Este resultado fue un ejemplo claro de que, en Spa, los sorpresas y las historias inesperadas siempre pueden suceder, y que incluso los equipos pequeños pueden brillar en un escenario tan exigente.
7. 2019: La victoria de Leclerc en medio de la emoción y la tristeza
El Gran Premio de 2019 representó el primer triunfo en la carrera de Charles Leclerc, pero fue un momento teñido de sentimientos encontrados. La noche anterior, el mundo de la Fórmula 1 quedó conmocionado por la muerte de Anthoine Hubert, amigo cercano de Leclerc y antiguo rival en categorías de promoción, en un accidente ocurrido durante la carrera de Fórmula 2.
Leclerc, partiendo desde la pole, resistió la presión de la Mercedes de Lewis Hamilton en los últimos compases de la carrera. Tras cruzar la meta en primer lugar, en su primera victoria en la categoría reina, el piloto de Ferrari dedicó la victoria a su amigo fallecido, diciendo en la radio: “Esta es para Anthoine”. Este momento fue profundamente emotivo y simbólico, dejando una huella imborrable en la historia deportiva y en la memoria de muchos aficionados.
8. 2022: La demostración de poder de Verstappen y Red Bull
El Gran Premio de 2022 ejemplificó la supremacía de Max Verstappen y su equipo, Red Bull. Debido a una penalización por cambio de motor en la clasificación, Verstappen partió desde la decimocuarta posición, lo que no fue un obstáculo para demostrar su talento y determinación.
En los primeros compases de la carrera, inició una remontada espectacular, superando rivales con facilidad en las zonas rápidas del circuito. En la vuelta 12 logró adelantar a su compañero de equipo, Sergio Pérez, para tomar la punta y jugar en otra liga. Desde ese momento, Verstappen consolidó su liderazgo y cruzó la meta en primer lugar, confirmando la superioridad de su monoplaza y su enorme potencial en un circuito que favorecía su estilo de conducción.
A lo largo de décadas, Spa-Francorchamps continúa siendo un escenario donde emergen nuevas leyendas, donde se rompen récords y donde se escriben algunas de las páginas más memorables de la Fórmula 1. Este circuito único y emblemático sigue siendo testigo de momentos históricos, y en este fin de semana los aficionados esperan que nuevos recuerdos queden grabados en sus retinas. La pregunta que queda en el aire es qué nuevo momento quedará en la memoria colectiva tras esta carrera. Solo el tiempo lo dirá.