Es el equipo que se mantiene en buena forma desde las 24 Horas de Le Mans. En la prueba más significativa de la temporada, Porsche logró mantener el pulso a la Scuderia y disputó la batalla con Cadillac, que parecía ir a otro nivel durante las 6 Horas de São Paulo. Con este balance, por el momento favorable, la firma alemana aspira a continuar esa buena racha.
Este fin de semana, los 963 harán su debut en el Lone Star Le Mans, sobre la impresionante pista del Circuito de las Américas, con una meta clara: subir al podio. “Guardamos muy buenos recuerdos de Austin, entre 2015 y 2017 conseguimos tres victorias con el Porsche 919 Hybrid”, comenta Thomas Laudenbach, vicepresidente de Porsche Motorsport. “Ahora debemos lograrlo en Texas con el Porsche 963. No hemos sido tan competitivos como esperábamos esta temporada, pero dimos la vuelta a la situación en Le Mans y, gracias a un podio en São Paulo, hemos conservado nuestras opciones de campeonato. El equipo está al máximo y deseoso de disputar lo que promete ser una prueba muy reñida en el Circuito de las Américas.”
Actualmente en tercer lugar del campeonato de constructores, Porsche podría asestar un golpe importante si Ferrari volviera a sufrir una avería. También habrá que vigilar a Cadillac, que competirá en casa. “Viajar a Austin siempre es un momento muy especial. La ciudad tiene un encanto único y el clima suele ser fantástico. También valoro mucho el circuito. El año pasado no fuimos particularmente fuertes en Texas, pero tras un análisis detallado entendimos las causas. Espero poder aplicar esas lecciones este fin de semana, mejorar nuestro rendimiento y sumar muchos puntos”, explicó Laurens Vanthoor, piloto del coche n.º 6.
Porsche contará también con representación en GT3 con el #92 de Manthey, que encabeza el campeonato. En Austin tendrá la oportunidad de ampliar su ventaja, que actualmente es de 13 puntos. Las Iron Dames llegarán a Texas con ambiciones: el equipo femenino de rosa continúa con un excelente resultado en la ELMS, tras una cuarta plaza en Spa. Y Célia Martin, la piloto de la clase bronce, muestra progresos evidentes.