Con apenas 22 años, Théo Pourchaire ya acumula experiencia en una buena cantidad de competencias. Ha pasado por las fórmulas de promoción, ha probado la IndyCar y, actualmente, se adentra en el mundo de la resistencia. Aunque no posee un asiento en la Fórmula 1, el piloto proveniente de Grasse ha conducido repetidamente las máquinas más veloces del planeta.
Un currículum notable, pero a menudo se ha visto frenado por las puertas cerradas. «2024 fue un año bastante complicado. Siento que merecía algo mejor tras alzarse con el título de Fórmula 2», sostiene Pourchaire. En efecto, sin volante en la Fórmula 1, encontró refugio en la IndyCar, pero la experiencia fue de corta duración. Afortunadamente para él, Peugeot le abrió una oportunidad como piloto de pruebas. Y, poco después, le dieron el salto titular para las 8 Horas de Bahrein 2025.
Peugeot ha respaldado notablemente su camino en la resistencia. La firma francesa le ayudó a asegurarse un contrato, ya que su objetivo era que condujera este año para asimilar las grandes líneas de la disciplina. Así, el piloto fue a parar a Algarve Pro Racing en la ELMS.
Se abrió ante él, por tanto, un entorno distinto: compartir coche con dos compañeros de distinta experiencia, lidiar con el tráfico generado por coches más lentos, comprender la gestión de los neumáticos y soportar esfuerzos físicos de larga duración. «Con Mathias Kaiser, nuestro piloto plata, se trata de una forma de trabajar diferente. Él tiene más experiencia que yo en la LMP2, pero en el automovilismo hay cosas que ve con menos claridad; hay que ayudarle. Eso me gusta. La resistencia es, más que nada, un deporte colectivo, a diferencia de los monoplaces».
Pues bien, la primera persona a la que quieres ayudar es tu compañero de equipo
«Creo que mis compañeros se apoyan en mí para eso y no hay problema con ello. Quiero ganar. Es un deporte de equipo: necesito un coche competitivo y buenos camaradas, así que intento echarles una mano. Vemos videos juntos sobre la gestión del tráfico, me han enseñado mucho. En cuanto al pilotaje puro, he compartido mi experiencia. Hay que cambiar la mentalidad en la resistencia. En la Fórmula 1 y en las categorías inferiores, hay dos enfoques muy marcados en el garaje. Si trabajas con personas que saben gestionar sus emociones, todo puede mantenerse sano. Al final, en monoplazas la primera persona a batir es tu compañero; ahora, la primera a ayudar es también tu compañero. Todo debe fluir en ambas direcciones».
Desde las 8 Horas de Bahrein, Théo Pourchaire pasará a estar en el centro de la escena. Tomará el puesto de Stoffel Vandoorne en Peugeot. Para estar preparado, se llevó a cabo una extensa sesión de pruebas en Austin. El fabricante preparó un programa intenso: relevos en carrera, vueltas de clasificación y paradas en boxes. «Conozco todos los procedimientos; es exactamente como si hubiera participado en las siete carreras anteriores de la temporada», comenta.